Desde que partí no soy la misma;
la misma niña, la misma mujer.
Ahora soy pasado y tu mi ayer.
Desde que me fui
me convertí en la que soñabas.
Ahora todo ha cambiado
y hasta tu que tanto he amado.
Lo que sarcasticamente no cambia
es la esencia de lo que sentimos.
Y a lo mejor es destino
y al lo mejor sólo así.
Si me ves, si ves quien soy ahora,
te enamorás de mi.